No estoy seguro de haber visto una novela íntegra. Y eso que vi muchas, pero muchas, muchas.
Tampoco hablo de haberme perdido, uno, dos o diez capítulos de lo 120 que suele tener una novela standard.
Me refiero a una costumbre, una forma de ver TV, un tipo de relación que entablo con este tipo de programas.
Les cuento como lo hago yo los invito a probar:
1) No hay que perderse los primeros capítulos, son esenciales!
Ahí se exponen las principales líneas argumentales, por lo general en la primera y segunda semana nos enteramos quién quiere con quién, quién no quiere que ellos quieran, las verdaderas relaciones filiales - hijos ocultos o abandonados, vivos dados por muertos, parientes que no saben que lo son y amores ocultos - y en el mismo lapso mas o menos se entiende hacia donde irá lo historia.
2) Al menos una vez hay que ver los títulos de presentación de la novela en cuestión. De allí se desprenden varios elementos que nos pueden ser de utilidad. En otra entrada comenté que pueden ayudarnos mucho a entender el argumento, pero aunque así no fuese, es importante saber el orden en que aparecen los protagonistas. No es lo mismo Oreiro-Arana que Arana-Oreiro. Menos derecha-izquierda o arriba y abajo. Otro dato relevante de los títulos es quienes No aparecen en los mismos. Tomemos el caso de Malparida, un buen observador facilmente podía suponer que Patricia Viggiano (esposa de Raúl Taibo y rival de Renata) tenía poca vida en la historia (Renata la mata ¨accidentalmente¨) porque no aparecía en lo títulos sino en los ¨participaciones especiales¨ al fin del primer bloque.
3) Es importante estar atento a las publicidades, una vez establecido el hilo argumental antes mencionado las escenas que se ven en estas suelen, para el experto observador, ser una guía de los avances en la historia.
4) Es importante ver ¨al menos¨ uno o dos capítulos al mes, preferentemente los lunes o los viernes (o en esta época de TV minuto a minuto el primero y ultimo de la semana) son los únicos en que pasan cosas. Si tenemos que elegir uno de los dos, el del Lunes (se develan los misterios que quedaron del viernes).
5) Hay que estar atentos a posibles cambios argumentales relacionados con el bajo encendido (léase rating) quien haya visto el primer mes de ¨Botineras¨ poco podrá entender de como va la cosa ahora. Uds. sabían que el personaje de ¨El Flaco Riveiro¨ entró a esa novela para tener un romance con un personaje que en la primer etapa hacía Diego Reinhold? Se grabaron algunas escenas y luego con el viraje de la trama tardaron un mes en encontrarle la vuelta con el personaje de ¨Lalo¨ y que finalmente se convirtió en una de las líneas argumentales mas relevantes de la tira.
6) Un dato importante es encontrar alguien que sí se haya hecho adicto a la novela, en el trabajo, en el supermercado, entre las madres de la escuela y hasta en el gimnasio. Esta persona será de suma utilidad para hacerle preguntas estratégicas del tipo: el padre de la protagonista ya sabe que ella es su hija? o de quien es el hijo que espera la esposa de el galán?. Estos datos pocas veces se ven en las publicidades.
7) Aproximadamente a la mitad de la novela sería de suma utilidad que veamos una o dos semanas íntegras, de esta forma se verifica que todo lo que pensábamos sea correcto y lo que no lográbamos entender lo incorporamos.
8) Por último debemos intentar, dentro de lo posible, y con el fin de no sentirnos padres que abandonaron a la criatura ver los últimos capítulos. Informo que habiendo cumplido los pasos anteriores solo es imprescindible ver el último capítulo, especialmente si se trata de novelas locas e innovadoras como Montecristo, Resistiré, Son de Fierro (murió Mariano Martínez, como ya lo había hecho en Alma Pirata y 099 Central, con lo cual ya se venía hablando del tema...) o Botineras... que parece que nos va a sorprender.
Así que es cierto, pocas novelas he visto enteras, sin embargo me considero un experto en ellas y les puedo asegurar que siguiendo estos 8 consejos todos van a poder disfrutar de ellas sin volverse adictos y enfermos, porque no es bueno suspender salidas, no atender a las visitar o faltar al dentista por ver una novela.
Pero... si la atracción es fuerte, si no aguantamos y queremos verla toda, entera, día tras día, está bien! Para eso las hacen no?